miércoles, 23 de abril de 2014

Algunos consejos para ser feliz

Realidades que creamos a través de la imaginación. Lo que imaginamos que somos es en lo que nos convertimos. La relatividad de las cosas nos llevan irremediablemente a ser solo lo que pensamos que somos. Tenemos por tanto el poder de cambiar nuestras vidas solo cambiando el modo en el que vemos las cosas que nos rodean y nos vemos a nosotros mismos. Priorizar lo que amamos, lo que nos hace sentir bien, lo que nos aporta sentido y candor a nuestras vidas es el primer paso para ser felices. La felicidad no es el final de un largo camino. Como dice alguien muy querido por mi, al final del camino solo está el final. La felicidad es una opción que siempre está ahí presente, a pesar de que algunas personas, muchas en este mundo de hecho, tengan graves problemas y conflictos.
La felicidad puede atravesar enfermedades y rupturas solo con apreciar los pequeños detalles: el sol que brilla, una buena música, cuando nos alimentemos o bebamos agua, la sonrisa de un niño... es así de simple.
Expandir quienes somos y disfrutar de los dones que la Naturaleza nos ha regalado no debe ser algo exclusivo para los privilegiados que nacieron sin miedo. Todos tenemos la capacidad de autosanarnos y mirar más allá de nuestras inseguridades para realizarnos a nosotros mismos, sin miedo al amor y sin miedo a disfrutar de nuestras capacidades y expandirlas. Los seres humanos no hemos venido unos para triunfar y otros para fracasar, nadie debe encasillarse. Hemos nacido para vivir, disfrutar de la vida y aprender. Si algo no te gusta, abandónalo, tienes todo el derecho, y si alguien te incordia, aléjate de esa persona... así de simple. Rodéate de personas abiertas y optimista y haz lo que más te gusta. No tengas miedo a la desolación, ni al fracaso ni a la escasez. Nada es lo que parece. Si no arriesgamos, nunca podremos ganar. Acepta tus debilidades y tus imperfecciones, ellas son las que permiten que aprendas en el camino de la vida. Quiérete, acéptate, nadie es perfecto, ni tiene por qué serlo. Que no te engañen, ve más allá de las ilusiones  e intentos de manipulación de la sociedad que te rodea y defiende quien eres ante ello. Cree en ti, confia en ti y no habrá nada que no puedas conseguir. Vive, sueña, expandete allí donde estés y vayas por donde vayas. No temas a nada ni a nadie.